Según María Cristina Torrado no hay una definición exacta para el concepto de competencia, por lo que puede ser entendido como el conocimiento que alguien posee y la habilidad de aplicar el mismo en la solución de una tarea específica.
En el entorno tanto social como cultural en el que se desenvuelve el ser humano, se relaciona todo conocimiento en el acto que pueda estar produciendo cada persona, ya que su interacción con sus pares, la relación con sus otros conocimientos ya adquiridos y por último las propias conclusiones y deducciones de dicha relación, posibilita el entendimiento de la competencia. Al respecto conviene decir que estas manifestaciones son el proceso mental que subyacen bajo el uso del lenguaje en los diferentes campos de las disciplinas sociales y humanas, donde la convención de los procesos y las diferentes significaciones conforman el terreno común entre los seres humanos, hechos que han sido de sobre manera actuados durante el desenvolvimiento de los actos de cognición, tendiendo a ser, de manera puntual una adquisición de conceptos para la construcción de construcción en el transcurso de la vida.
De esta circunstancia, nace el hecho de que las anteriores consideraciones sean en si, la aplicabilidad de conocimiento como un saber hacer y un hacer sabiendo, áreas fundamentales en la manifestación de las competencias.
Hecho por: Sebastián Cardona y Henry Orrego.
